Tal día como hoy, hace 105 años en Dublín, un tal James Joyce se encontró con Nora Barnacle en la calle. Él tenía 22 años, ella 20. Su atracción es recíproca e inmediata. Ella, pelirroja revoltosa, dice Sí a la sexualidad, algo que ninguna joven decente haría en aquella época. Rebelándose contra el orden social, parten, sin estar casados, hacia Suiza, donde Joyce enseña inglés. Hasta el fin de su vida Nora le apoyará en su obra de escritor. "Ulises" transcurre durante la jornada del 16 de octubre de 1904 en Dublín. El libro, publicado en 1922 y perseguido por obsceno, termina con el famoso monólogo de Molly Bloom, esposa del héroe: "(...) me pidió si yo quería sí decir sí (...) le atraje hacia mí para que sintiera mis senos perfumados sí y su corazón latía como loco y sí dije sí lo deseo Sí".
Recuerdo que Otto leyó en voz alta, y junto a 6 compañeros de la escuela de teatro, el "Ulises" de cabo a rabo en la Plaza del Pi de Barcelona el verano de 1993, en el tiempo que dura la novela, osea, en 24horas. Lectura en tiempo real, vamos. Qué adolescente era todo, dios.
Por cierto, que Marilyn leyó en su día el "Ulises". para muestra, un botón:
La biografía de Nora Jones es la muestra de que muchas mujeres han sido una parte muy importante (y olvidada) del genio de sus compañeros, igual que Fanny Stevenson. Creo que son lecturas obligatorias.
ResponderEliminarPues sí, lo de Fanny Stevenson es de novela, desde luego. Gracias por recordármelo, Bar :)
ResponderEliminaresta bueno el blog. que diria joyce al ver que ahora todas dicen que si.
ResponderEliminaryo digo si con una ligereza que hasta me sorprende a mi misma.
el cayado tambien se lo vi a oscar wilde.
por lo de la arania y los bichos, hombre, nada, cosanguineo parece, empala a la arania y la dejas en la mesita de noche para que haga de espantabichos.