viernes, 18 de diciembre de 2009


Yo lo de ir en bici por esta ciudad no lo entiendo.
Llámenme viejuno, carca o lo que sea, pero no lo entiendo.
Soy el primer temerario que hasta se sube a un longboard para peinar el viento y fingir que tengo 16 años, soy el primer tonto que todavía tiene su bici de Decathlon "modelo 2004" y la deja dormir en la calle, pero se da una circunstancia que convive con estas mis dos pasiones urbanas. Y es que soy peatón. Sí, voy en bici y voy en longboard, pero también paseo como todo hijo de vecino.
¿Qué le pasa a un buen número de mal llamados ciclistas de Barcelona?
No sé, yo respeto a los peatones porque soy uno de ellos, pero llevo días viendo cosas que no tienen nombre. Muerte y destrucción en las calles de Barna.
Sí, mucha culpa la tienen las autoridades: su campaña para reducir la población lanzando bicis a mansalva antes de enseñar educación vial ha sido un error imperdonable (convertido en lo más cool que le ha pasado a Bcn en años, en la envidia de otras ciudades de Europa y en el hazmerreir de los que sabemos que "esto no cuela"), pero el ciudadano bien puede aprender solito algunas nociones básicas de civismo y conducción, no?
Dios, sueno viejuno, lo sé, pero me indigna ver a inútiles en bicicleta.
Ayer casi me mata un ciclista. Uno que iba haciendo el chulo por una acera donde a duras penas cabía un peatón. ¿Dónde está la bike police? Quiero montar una redada de ciclistas nocturnos que se dedique a pinchar ruedas de ciclistas gilipollas. Rollo "me infiltro en tu grupito guay de bicivoladores pero vas a fliparla cuando te pinche el neumático, nen".
Indignado.

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