Admito que se acercan quince días de órdago, difíciles de soportar, con gente inaguantable. Con gente. Mucha. Y preguntarán cosas insulsas, me señalarán, me pisarán y me gritarán.
Si me pillan de aquella manera o de aquella otra, sujéntense, bye, bye, y hasta otro ratito, eh?
jueves, 16 de diciembre de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario